Villanueva (La Guajira).
Jueves 23 de enero de 2014
En la correría que hago por los pueblos del sur de La Guajira, no podía faltar este pueblo, llamado con razón: ‘La Cuna del Acordeón’
Vengo de San Juan del Cesar, y aspiro a dormir esta noche en Valledupar.
Un colectivo que venía de Maicao, me recogió por $4.000, y al momento me inmiscuí en una agradable tertulia, con los otros tres pasajeros y el conductor. Un señor que va para Codazzi puso el tema de las ciudades bonitas de Colombia. Él, por supuesto, defiende a su Bucaramanga del alma. Pero la chica de Cartagena le argumenta con razones de peso, a favor de la ciudad heroica.
Sin embargo, cuando alguien pregunta cuál es el mejor vividero, todos sin excepción, hablan bellezas de Medellín y de los paisas.
Qué orgullo, esto me ocurre con frecuencia en los viajes, pero no deja de emocionarme ahora. Ellos, claro, se imaginaban de dónde venía yo, pero no por ello fueron elocuentes al hablar de mi tierra. Incluso, me preguntaron por ‘ese alcalde joven, de blue jeans…’. Se refieren a Sergio Fajardo Valderrama quien se ha hecho conocer en todo el país, no solo cuando fue candidato presidencial, sino por sus logros en los gobiernos de Medellín y Antioquia.
A mitad del camino, junto a un expendio de pipinas con gasolina venezolana, había una señora vendiendo plátanos asados con queso molido. ¡Qué horror!
Ante semejante espectáculo, no pude menos que pedirle al conductor que detuviera la marcha, para comprar una de esas ricuras. Estaba delicioso, con cascaritas quemadas, muy maduro y asado sin premura.
Este municipio guajiro tiene en total 23 mil villanueveros. La mayoría: 18 mil, habitan en la cabecera y los cinco mil restantes, viven en el campo.
El comercio y la agricultura son las principales actividades económicas de Villanueva; porque, aunque no pareciera, el municipio de Villanueva, tiene todos los pisos térmicos, ya que su territorio tiene frontera con Venezuela, y ocupa buena parte de la Serranía del Perijá. De ahí que el café es uno de los productos que también se cultiva en las laderas de la montaña.
Pero lo que destaca a Villanueva, es que ha sido cuna de famosos cantantes y acordeoneros, tales como Jorge Celedón, Jean Carlos Centeno, los hermanos Poncho y Emiliano Zuleta y el acordeonero del Binomio de Oro: Israel Romero. Y la tradición seguirá, pues existen escuelas de acordeón, en donde los niños villanueveros aprenden a interpretar ese instrumento.
Pagué mil pesos a una moto taxi que me llevó a la Plaza Dinastía Vallenata, que ahora luce un poco descuidada, con algunos terneros pastando la poca hierva que ha dejado el verano. A un lado se ve la estatua de un hombre tocando acordeón.
Cada año, a fines del mes de junio, se celebra en Villanueva, el ‘Festival Cuna de Acordeones’, que ha sido declarado Patrimonio Cultural y Artístico de la Nación.
Caminé dos cuadras para llegar hasta la plaza principal. Allí está una iglesia blanca y pequeña, pero que luce muy bien, a la luz de este sol canicular del medio día.
Hace mucho calor, camino siempre por la sombra y me encantan estos días de verano intenso. La iglesia estaba cerrada.
A continuación está también el edificio de la Alcaldía y, lo que no puede faltar en un pueblo de raigambre vallenata: la tarima, donde se celebran los festivales de música acordeonera.
Otros mil pesos, para que mi conductor me deje en el punto donde me bajé, para esperar transporte hacia Urumita, el pueblo vecino.
Qué paseo tan delicioso este, todo lo que veo me parece maravilloso, estoy feliz, quisiera que este recorrido no terminara. La gente, el sol, el calor, todo me gusta. Qué privilegio poder hacer estos viajes.