Pijiño del Carmen (Magdalena).
Al sur del departamento y sobre la margen oriental del brazo de Mompox del río Magdalena, se encuentra Pijiño del Carmen.
Bellezas de la Depresión Momposina.
Anteriormente abundaban por acá extensos pijiñales: árboles medianos de frutos comestibles con cáscara gruesa y carnosidad fibrosa, que le dieron nombre al municipio.
Deberían sembrarse algunos árboles de Pijiño en el parque central y algunas avenidas.
Desde Santa Ana a Pijiño del Carmen son 10 kilómetros con buen asfalto. Vengo en la moto de mi amigo Oswaldo, gran conductor y compañero de viaje.
No me canso de admirar los árboles frondosos, la floresta fresca por la lluvia reciente y algunas nubes que nos protegen del sol.
Cerca al alambrado once reses mascan chicle, perdón, rumian el pasto regurgitado durante la hora del descanso.
Me encanta el color de su piel, a veces crema difuminado o gris o, café hacia marrón oscuro. Y ni hablar del olor a boñiga en el potrero que evoca años de infancia y paseos familiares.
Un potranco con mancha blanca en su frente, no se separa de la madre que pasta al lado de las vacas.
Recorrido por el centro.
Me cuentan que en Pijiño hay muchos ganaderos y gente con dinero. Y sí, en las calles hemos visto algunas camionetas de alta gama.
A la entrada al pueblo se pasa por el colegio de secundaria donde flamean banderas de Colombia, el departamento y el municipio.
También al ingreso al casco urbano se ve el cementerio con amplio parque al frente. Plantas de coral decoran el espacio y bancas cómodas esperan a los jubilados.
Es interesante entrar a los camposantos, sobre todo cuando hay mausoleos antiguos y de buen diseño. Y vale la pena fotografiar las tumbas con flores coloridas, así sean artificiales.
Dos tanques de agua gigantes y encumbrados son lo más visible incluso antes llegar. Uno cuadrado y otro redondo, podrían utilizarse además como miradores para observar el casco urbano completo y las extensas lagunas que rodean el pueblo.
Pijiño tiene una moderna sede de dos plantas donde funciona la Administración Municipal con pórtico de columnas a la entrada.
Fiestas y Carnavales.
Los colores llamativos que tiene ahora la Alcaldía, los tiene también la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, construida sobre plataforma de un metro de altura.
No solo es una ermita sencilla y sin torre, sino que el color blanco que tenía antes, hacía que se destacara poco en el centro. Menos mal las flores de achira que había a un lado del templo le brindan a la iglesia el contraste que merecía.
Las celebraciones de semana santa son muy concurridas en Pijiño del Carmen, lo mismo que los Carnavales.
La Feria Ganadera y el Festival del Bocachico son otras festividades que atraen visitantes al municipio.
Pero la conmemoración más auténtica tiene lugar el 3 de mayo de cada año, cuando sale en procesión el retablo de la Virgen de Pijiño impreso en un tablón, el mismo que un lugareño encontró hace tiempo en la ciénaga.
En las calles se ven residencias modernas, menos una casa de bahareque que tiene a la vista la estructura en barro y caña brava.
Ahora se planea construir en Pijiño del Carmen un moderno malecón turístico con vista a La Arená: la pequeña isla frente al casco urbano. La presencia de aves en el islote atraerá a muchos visitantes que en amaneceres y atardeceres podrán disfrutar de un paisaje de ensueño.
Un muro de contención para prevenir inundaciones en temporada de lluvias, mirador, puerto, cafetería, senderos ecológicos y restaurante hacen parte del proyecto oficial.
Antes de terminar la visita a Pijiño, ‘regaño’ al lugareño que vende pájaros cantores dentro de jaulas de alambre. Qué feo eso:
‘Qué tal si te encierro a ti en una pieza forrada en oro y donde no te faltará la comida. ¿Te gustaría perder la libertad?’.
El tipo apenas se ríe.
Futuros cracks
Estuve conversando con niños que jugaban futbol frente a la iglesia. Sobre terreno en cemento, descalzos y sin camisa, pero felices.
Sin el refrigerio y agua que no puede faltar en las ciudades, estos muchachos no olvidarán su niñez de pueblo, en un ambiente tan libre y con amigos de verdad. Los reemplazos de Falcao y James son los que están entrenando acá en Pijiño del Carmen.
Uno de ellos Jeimy López me acompañó hasta la Ciénaga El Palmar, lo más de querido. La Ciénaga se ve esplendorosa, muy limpia y con plantas acuáticas que exhiben flores color violeta en medio de hojas carnosas y grandes.
Estamos en plena depresión Momposina, una región de gran riqueza hídrica y fauna abundante. Navegar en las mañanas por los caños y espejos de agua es todo un espectáculo, por la cantidad de aves que vuelan sobre las canoas, en busca de alimento.
Desde Mompox vienen hasta las ciénagas de Pijiño, excursiones con turistas que incluso se bañan en la parte menos profunda de la laguna. Luego regresan en lancha al pueblo patrimonial.
Una de las delicias gastronómicas en Pijiño es la chicha de arroz y piña, que preparan con la cáscara de ‘la reina de las frutas’. Huy, qué sabor tan delicioso y oportuno para el calor sofocante de la tarde.
En este municipio viven en total 14.000 pijiñeros, repartidos por partes iguales en el pueblo y en los campos.
Alcaldes de Pijiño del Carmen han sido: 2.000-2003 Juan Carlos Martínez; 2004-2007 Mario Machado; 2008-2011 Antonio Eljadue; 2012-2015 Yanexi Ospino G.; 2016-2019 Orlando Machado Machado y hasta el 2023 es el señor Carlos Alfonso Machado Arquez.
Miércoles 13 de septiembre de 2017
Excelente este escrito, no conocía este municipio, y por las fotos se ve muy hermoso.
Sí, a veces se lleva uno sorpresas frente a pueblos de los que no esperaba demasiado. Saludos.