La Argentina (Huila).
Elías, Saladoblanco y Oporapa son municipios al sur del departamento del Huila, junto con La Argentina. ¿Conoce alguno de esos pueblos?
El viaje desde Oporapa a La Argentina se hace en camioneta cuatro puertas, por terreno sin pavimento. En la base del retrovisor cuelga el zapatico que se le quedó al bebé de seis meses y el escapulario con la imagen de la patrona de los conductores.
Carretera de ensueño.
La carretera entre Oporapa y La Argentina es de una belleza increíble. Sobre todo en cercanías al páramo la vegetación que rodea el camino tiene variedad y frescura desbordante. Como anoche llovió todo se ve resplandeciente y húmedo.
La variedad de helechos cuyas hojas saludan con movimientos pendulares el paso de la camioneta, es de admirar. Diversidad de especies se hacen presentes: mariposas en los pantanos que dejó la lluvia, hojas de todos los tamaños y formas y de vez en cuando un pájaro de plumas coloridas que despega de su rama ante el ruido del motor.
Empezando la cuesta abundan los árboles de guayabas. Las frutas maduras se pierden en el suelo, pues transportarlas hacia un centro de acopio saldría muy costoso. Son los pájaros y algunos insectos quienes más disfrutan de la cosecha.
Algunos pasajeros refieren que en La Argentina hay muchos cultivos de guayaba. Incluso hay una gran finca que cada cierto tiempo envía a las fábricas de bocadillos de Medellín toda la producción.
El ascenso hasta el Páramo no es muy inclinado, casi toda la carretera transcurre en travesía hasta La Argentina.
Una hora más tarde pasamos por el resguardo indígena de Los Corrales donde algunos cultivan mora y otros se dedican a la ganadería.
Iglesia decente.
Apenas nos acercamos a La Argentina comienzan a verse cafetales y casas campesinas con jardín en la fachada.
La iglesia de La Argentina fue construida en el costado más alto de la plaza. Muy ostentosa por fuera, en el interior solo se destacan las tallas en madera del mobiliario.
En el parque de árboles frondosos departían unos 60 profesores en cese de actividades para exigir mayores garantías por parte del gobierno. No es buena la presentación personal de los maestros, lucen mejor los conductores de buses.
La mayoría de los docentes pasan de los 50 años y casi todos esperan su jubilación.
Mientras tanto los alumnos juegan bolas en la plaza. Muy bueno que en los pueblos se practiquen esos pasatiempos y los menores no estén pegados del celular.
Sorpresa artística.
Después de repartir tarjetas en la Alcaldía, ubicada en la parte abajo de la plaza, entre ir hacia la izquierda o hacia la derecha, escogí la diestra, no sé por qué razón.
La supe enseguida: la Inteligencia Universal que guía mis pasos me llevó al sitio más interesante que podría encontrar en La Argentina: El Museo Tomasa Villalobos, un centro artístico financiado por la Fundación Tomasa Villalobos, una mujer pintora que vivió en La Argentina.
Su hijo: Pedro Nel Villalobos, es quien dirige la Fundación y la construcción del Museo. Lo saludé justo cuando salía de la Galería y se devolvió para atender mi visita.
Pedro Nel heredó las dotes artísticas de su madre y es un pintor reconocido que vive en París y ha venido a terminar la edificación en La Argentina. Lo interesante es que la sede de tres plantas tiene un diseño revival, en cuanto toma características de varios estilos arquitectónicos.
El edificio del Museo termina con una atalaya alta que recuerda el Palacio El Vechio de Florencia en Italia y las puertas exhiben el estilo propio de la arquitectura italiana o la ventana a través de la cual se asoma el Papa para su homilía de los miércoles.
Con Pedro Nel recorrí las distintas salas, todavía en adecuación. Allí están muchas de sus obras, algunas rememorando pinturas de artistas clásicos y otras más innovadoras.
Arriba del edificio flamea la bandera tricolor, para lo cual este sitio está autorizado dado que se trata de una Entidad Museal de Colombia, certificada por el Ministerio de Cultura.
Quería tener una vista general del casco urbano de La Argentina, para lo cual contraté una moto-taxi que me subió hasta Pescador, el sitio desde el cual se ve todo el pueblo, aunque no muy destacado pero sí rodeado de verde.
Fiestas y hospedajes.
En La Argentina existe una variada oferta de fincas con piscina y hospedaje, unas más cerca del pueblo que otras, pero todas aptas para disfrutar de la naturaleza, en familia o en pareja.
Y no faltan las celebraciones populares cada año, como el ‘Festival Artístico de la Montaña’ y el ‘Festival de Música Colombiana Néstor Castillo’.
Por poco me quedo.
Esta mañana para asegurar el puesto de copiloto, de una vez pagué al conductor, los $19.000 que cuesta el cupo hasta Pitalito.
A las 11:45 debía salir el transporte, pero como el carro se llenó temprano, salió a las 11:38.
Afortunadamente alcancé a ver la camioneta cuando subía por la plaza. Me tocó correr, gritar, silbar y con ayuda de los moto-taxistas que estacionan en la plaza y repitieron mis rechiflas, el chofer escuchó las súplicas y pude ocupar el puesto de preferencia que ya estaba en nalgas de otro pasajero.
No, qué susto y qué suerte. Un minuto más y me deja el bendito transporte, a quien le reclamé por su olvido.
Alcaldes de La Argentina han sido: 2016-2019 Edwin Harvey Barajas Hernández y hasta el 2023 es Javier Hernán Rincón Silva.
Acá habitan en total 11.000 argentinos, 4.000 en el pueblo y 7.000 en las veredas.
Fecha de la visita: Viernes 9 de junio de 2017.