Giraldo (Antioquia).
Para llegar a Giraldo se puede viajar en bus desde Medellín o Santa Fe de Antioquia hasta Manglar, por una carretera en buenas condiciones, pendiente y hermosa.
Esta vía que quedará en desuso cuando pongan al servicio el Túnel del Toyo, permite contemplar panorámicas preciosas sobre el río Cauca, Liborina allá abajo y las montañas majestuosas que enmarcan el sector.
Descender desde el alto hasta la ciudad madre en bicicleta con paradas sucesivas para contemplar el paisaje, es un encanto.
En Peñitas existe un pequeño caserío desde donde sale el ramal para Buriticá, importante Centro Minero del departamento.
Más adelante aparece Manglar, el corregimiento de Giraldo donde es posible abordar una motorratona para llegar a la tierra de la cebolla, el fríjol y el anís.
Cebolla por Anís.
Giraldo fue el principal proveedor de anís para la Fábrica de Licores de Antioquia hasta hace 30 años, cuando la licorera empezó a importar una esencia de Europa y dejo de comprar la planta giraldina.
En el tramo de carretera pavimentada por el cual se entra a Giraldo se aprecia muy bien la congruencia de las dos vías que vienen de Santa Fe de Antioquia: la carretera actual menos directa y el futuro enlace que unirá a la ciudad madre con Cañasgordas, a través del que será el túnel más largo de Suramérica.
La vista sobre el corregimiento de Manglar también exquisita cuando, como hoy, el sol ilumina el poblado con rayos nuevos y directos.
En la motorratona a través de una pendiente inclinada llegamos directo al cementerio para tener una vista de conjunto sobre el pueblo.
El camposanto queda tan retirado del casco urbano que a los muertos les dan un recorrido antes de colocarlos en la tumba.
Los extensos cultivos de cebolla larga me recuerdan los de la hortaliza cabezona en Aquitania (Boyacá). Giraldo debería ser también ‘La Capital de la Cebolla Junca’. Hay bastantes fincas con ese sembrado; los campesinos aprovechan la abundante luz solar para que crezca gruesa y fértil.
Pocos habitantes.
A Giraldo se ingresa por una calle larga en donde se asientan el Coliseo y el Colegio Luis Andrade Valderrama, con edificación reciente.
Las calles del pueblo no son en cuadrícula sino que, por lo quebrado del terreno, tienen pendiente moderada y describen líneas serpentinas.
En el 2009 el parque de Giraldo era pobre, aunque más bien plano. Solo tenía dos árboles, dos bancas y una fuente de agua en piedra a un lado de la plaza.
La Alcaldía funciona en un edificio moderno de tres plantas y con arcos . Recuerdo la oficina de Planeación y el Salón de sesiones del Concejo Municipal.
La Casa de la Cultura externamente parece una casa antigua y agradable, pero por dentro fue reformada y ahora presenta una estructura de concreto.
En el 2009 la Iglesia Principal de Giraldo no tenía gracia: un salón grande con techo de asbesto y de fachada una espadaña sencilla. Ahora luce una nueva cara con frontis tipo neo-gótico.
Lo mejor de Giraldo es, claro está, la Casa Cural. Una casa grande ubicada en la esquina de la plaza. Con baldosa antigua y auténtica pero, lo que más llama la atención es el cielo raso en lámina corrugada seguramente de origen europeo que, al hacerle mantenimiento con pintura de aceite profanaron una valiosa antigüedad.
Otros datos.
Hacia el oriente hay fincas extensas en las que el paisaje es protagonista, con sembrados de cebolla, por supuesto.
La carretera que une a Giraldo con la troncal de Urabá baja hasta el puente sobre el río Puná y asciende un poco hasta llegar a la arteria principal.
Alcaldes de Giraldo han sido: 2008-2011 Argiro Manco; 2012-2015 Jaime León Pérez Guerra; 2016-2019 Wilmar Adrián Manco Hernández y hasta el 2023 es el señor Jorge Alcónides Úsuga Carmona.
Este municipio ubicado a 120 kilómetros de Medellín, tiene en total 4.200 giraldinos, de los cuales 3.000 viven en el campo y 1.200 habitan el casco urbano. Así que Giraldo es un municipio netamente agrícola.
Jueves 5 de marzo de 2009.