Chinchiná (Caldas).
Martes 14 de julio de 2009:
En el Terminal de Transportes de Pereira, decido continuar el viaje hasta Chinchiná. Esta vez el bus anduvo por la carretera vieja, no por la Autopista del Café. Por esta vía anterior, se ven cafetales preciosos, sobre todo a partir de Santa Rosa de Cabal.
Me bajo en el centro de Chinchiná para conocer la iglesia de las Mercedes, de estilo gótico, muy bonita.
Tiene 17 vitrales grandes muy bellos con pasajes bíblicos: Moisés, Abraham, los profetas mayores, el sacrificio de Isaac, la Resurrección de Cristo, etc. Cada vitral tiene la leyenda correspondiente en la base y a los lados hay celosías que permiten la entrada de aire.
Sobre el altar principal hay tres ventanas traslúcidas muy bonitas. Una de ellas exhibe la imagen de la Santísima Trinidad.
El borde de los arcos ojivales está decorado con cintas doradas
El parque inmenso que hay al frente de la iglesia, tiene cinco ceibas muy altas y frondosas y en el centro de la escuadra se encuentra la estatua del Libertador Simón Bolívar.
En un costado del parque hay una Rebeca en bronce bellísima y, supongo yo, traída de Europa. Es la imagen de una mujer con detalles muy finos y en actitud fresca y natural.
El alcalde hasta el 2015, es el señor Jair Antonio Tabares Chica. Chinchiná que es la tercera ciudad de Caldas, después de Manizales y la Dorada, tiene en total 53.500 habitantes, de los cuales 45.000 viven en el centro y 8.500 son campesinos. Se trata de toda una ciudad, con mucho comercio alrededor de una plaza inmensa.
El Palacio Municipal es un edificio de siete pisos sobre el marco de la plaza y con una calle decorada con faroles.
Hace una tarde hermosa, se ve mucha gente en el centro y a las seis de la tarde aprovecho los últimos rayos del sol para tomar algunas fotografías de la iglesia y el parque.
Qué ambiente tan agradable se respira aquí. Este pueblo me gusta, tiene swin, lo atrapa a uno.
La calle 13 con carretera 7 es la esquina que sirve de Terminal de Transportes y por donde pasan y cuadran todos los buses regionales que transitan por la carretera vieja.
Ahí al lado está lo que fue la estación del Ferrocarril, un edificio pequeño pero de hermoso diseño antiguo, que merece ser restaurado. Menos mal que no lo han tumbado y se conserva en buenas condiciones.
En Chinchiná hay muchas empresas y fábricas grandes como Calzado Bata, la fábrica de Café Liofilizado, Tubos metálicos Arme, una planta de productos Alpina, la empresa de confecciones Chiroloco, entre otras factorías.
No esperé encontrar una ciudad tan próspera. En tiempos de Pausa Nutritiva la identificaba solo por las mandarinas oneco que aquí se producen.
Miércoles 15 de julio de 2009:
Anoche estuve en Palestina y hoy amanecí en la excelente habitación de un hotel central. Temprano estuve desayunando en La Barra, otro establecimiento administrado solo por mujeres y ubicado frente a la Casa de la Cultura de Chinchiná.
En el Centro Cultural estaban varios profesores del Colegio de los Andes, el establecimiento educativo más prestigioso y mejor ubicado de Chinchiná. Por la tarde la vista desde ese alto debe ser excelente.
Luego fui a la Oficina de Turismo que funciona en la vieja estación del ferrocarril, para informarme sobre sitios interesantes para visitar en Chinchiná. Pero lo más ‘interesante fue la vieja’ que me atendió: qué chica tan hermosa y morena de ojos claros. Por ella supe que desde el Alto de El Chuscal, ubicado al oriente de Chinchiná, también se obtiene una preciosa vista del pueblo.
Más adelante fui a conocer la Galería muy completa en donde funciona el mercado y cuadran los camperos que viajan para las veredas.
En fin que, Chinchiná me ha parecido un pueblo muy agradable: calientico, plano, con buen comercio y mujeres muy bonitas. Las calles son amplias, la plaza gigantesca y bien sombreada y la iglesia de las Mercedes de verdad muy bonita.
En la tarde por $ 800 abordé una buseta de servicio urbano que me llevó cerca del Colegio Los Andes, el mismo que se ve de muchas partes del pueblo y tiene una vista hermosa sobre la zona. Para llegar hasta cerca de Los Andes se pasa por los barrios Verdún y Túnel.
Por el conductor de la buseta supe que ese colegio no funcionará más como tal a partir del año entrante, pues con miras al aeropuerto del Café, ese edificio de excelente ubicación se convertirá en un hotel.
Desde la salida para Pereira por la carretera vieja, exactamente en la calle 8 con carrera 11 A, basta subir 50 metros para tener una vista inmejorable de Chinchiná con su iglesia gótica tan bella en todo el centro.
En seguida recogí el morral en el hotel y salí a la avenida por donde al momento pasó la buseta de Arauca, que me llevó hasta la capital de Caldas.