Caucasia (Antioquia).

Sábado 31 de mayo de 2014

Capital del Bajo Cauca.

Ojalá que lo de HidroItuango no ascienda a mayores, pues incluso en días normales se ven a un lado de la vertiente y cerca a Caucasia, ‘catapiz’ de concreto para controlar las aguas del segundo río más grande de Colombia.

Caucasia es un importante centro comercial, ganadero y minero. Las lagunas Colombia y de Margento suministran alimento a sus pobladores y al mismo tiempo permiten controlar el caudal del río Cauca.

Es mucho lo que me falta por conocer de Caucasia, apenas si estuve de paso varios días, pero no he ido a su aeropuerto Juan H White, ni al Jardín Botánico, me falta conocer los parques: Lineal, del Fundador y de Banderas.

Queda pendiente por visitar la sede de la U de A, la Casa de la Cultura Reinaldo González y otros sitios interesantes de esta, que es ya una ciudad.

Antiguamente este pueblo se llamó ‘Cañafístula’ y hoy esa especie es la flor insignia de Caucasia, ‘la Capital del Bajo Cauca’.

Los taxis llegan hasta un lugar central, cerca de la Plaza de Mercado y la iglesia de la Inmaculada Concepción que, cosa rara, tiene la fachada, frente al caudaloso río Cauca y el monumento a La Madre.

Guía inesperado y conocedor.

En el hotel me recomendaron para almorzar, el Restaurante La Fonda, a dos cuadras del hospedaje. Mientras comía disfruté del primer tiempo del encuentro: Colombia 2 Senegal 2. Me gustó mucho que nuestra selección no ganó y cometió errores que deben corregirse antes del Mundial Brasil 2014.

En una salida de la habitación, conocí al médico que trabaja para el Servicio Seccional de Salud del Departamento, y tiene a su cargo esta región de Antioquia que, conoce como la palma de su mano.

Pues el galeno resultó ser la persona idónea para recomendarme cómo hacer la gira por el Bajo Cauca, dónde tomar el transporte, por qué medio, terrestre o acuático y a qué partes ir y, cuáles deberían esperar.

Una moto me dejó en el Terminal de Transportes, luego de pasar por donde se levantan dos esculturas con chatarra: una a la pesquería, sobre la carretera troncal, con peces que saltan de la malla, y otra, a la entrada al Terminal,  en honor al minero artesanal, donde se destacan las bateas utilizadas para el barequeo.

Caucasia-Medellín.

Yo que llego al Terminal y estaba para salir una moderna y cómoda buseta Hino, que me llevará hasta Medellín por $30.000.

Alguna vez, después que hubo muchos muertos en el accidente de tránsito de un bus intermunicipal, yo escribí una carta a El Colombiano, sugiriendo que, dado que en Colombia son muy pocas las carreteras con separador o de doble calzada,  todos los buses  deberían tener las sillas con cinturón de seguridad.

Y cuál no fue mi sorpresa al descubrir que este nuevo bus de Coonorte, dispone de cinturones en todas las sillas. Creo que yo fui el único que lo usó, pero bienvenida esa medida!

Subiendo a Valdivia, me llama la atención en el kilómetro 68, una bella cascada con balneario en su base que, este lunes festivo está bien concurrida.

Y más adelante, en el kilómetro 50, están las partidas para Briceño, el otro pueblo de Antioquia, que no he visitado.

Después de pasar el Alto de Ventanas, viene un trayecto largo, muy oscuro y con vegetación virgen; más adelante otro tramo más abierto y luego sí, el famoso Restaurante Mina Vieja y, ahí pegado: Yarumal.

Y a la salida de Yarumal, vi por primera vez una imagen del Padre Marianito, al pie de una mula. Se trata de una escultura bonita y reciente, que no la había observado antes.

Acá habitan en total 90.000 caucasianos, 70.000 en el pueblo y 20.000 en las veredas.

El alcalde de Caucasia hasta el 2019 es el señor Oscar Aníbal Suárez.