Carnaval de Negros y Blancos Pasto 2023.
El Desfile Magno es el evento con el cual se cerró el Carnaval de Negros y Blancos 2023. Ese evento supremo se lleva a cabo en la capital nariñense cada 6 de enero.
No hay duda, el de Pasto es el mejor Carnaval de Colombia, lástima que no lleguen tantos turistas del interior como sería deseable.
Mañana de sol.
Qué belleza de día el que hace hoy, con firmamento azul sin nubes para admirar las carrozas con derroche de creatividad y color.
El día de verano continuó durante toda la jornada, parece que San Pedro también salió a disfrutar de la fiesta.
La mayoría de establecimientos comerciales están cerrados hoy 6 de enero, el día más importante para los pastusos. Solo encontré dónde desayunar en un restaurante de paisas abierto en la carrera 10 14-60.
Estuve conversando con un médico harlista que vino en su moto de Medellín. Él opina que los costos de los pasajes aéreos de hasta 900.000 pesos son los que hacen que la gente del interior no venga a Pasto a disfrutar del Carnaval. Sí, puede ser pero entonces habrá que fomentar el viaje en auto particular.
Viaje en bus.
Eh, siquiera vine al Carnaval 2023, hubiera sido un error haberme quedado, por pereza a los viajes en bus. La venida estuvo muy bien y así será el regreso.
Debo hacerme ‘amigo’ del viaje en bus, disfrutar de la comodidad, el paisaje, las paradas y dar gracias por tener el dinero para costear los desplazamientos.
¿Qué tal el viaje de tantos migrantes que hoy tienen que desplazarse a pie con sus niños y el poco equipaje que puedan llevar a cuestas?
Que tal haberme perdido el Desfile Magno con este día de luz y brillo sin igual, lo hubiera lamentado mucho tiempo.
Comenzó el desfile.
Después de dar los últimos toques a las carrozas, a veces con de gigantescas grúas, todo estuvo a punto y arrancó la procesión.
Abrió el desfile una de las carrozas más bellas con la Reina del Carnaval a bordo.
En seguida desfilaron los silleteros venidos de Medellín a quienes el público aclamaba entusiasta. Se nota que los paisas le caemos bien a los pastusos.
Le sugerí al silletero de adelante que de vez en cuando gritara: ‘Que Viva Pasto, carajo’, para acabar de ganarse el favor del público.
Aquí donde estoy comienza el intercambio vial del Estadio La Libertad y al frente hay unos silos de aluminio de no sé cuál empresa.
Fue buena idea quedarme muy al principio del desfile pues de esa manera aprovecho más tiempo la inclinación del sol cuando asciende hacia el cenit. En el sector de Champagnat disfrutaría menos de esa luz inclinada.
Hay que vivirlo.
Muchos conjuntos musicales acompañan cada grupo de porta-estandartes. En uno iba la misma mujer de piernas bien torneadas que se mueve lo más de bueno al bailar y a quien había felicitado el martes.
Entonces esta vez no me aguante las ganas y la saqué como pareja, bailamos suelto en plena calle en medio de la algarabía del público. Le pedí el favor a un colega que me fotografiaron durante el baile para compartir las fotos con amigos.
Y es que me siento pleno, feliz disfrutando de esta fiesta tan alegre y contagiosa. Me encanta escuchar la música que interpretan las bandas, me río con todo y saludo a otros fotógrafos.
Una mujer israelí me prestó su trapito especial para limpiar la lente de la cámara. Con la harina que tiran muchos, el aire se mantiene contaminado y ensucia la cámara.
Abundante luz.
Después de las carrozas desfilan instalaciones individuales preciosas, de las que cargan sobre el tronco los participantes.
Como siempre le pedía a los porta-estandartes que dieran media vuelta para fotografiarlos con sol favorable y el firmamento azul de fondo.
No todos los fotógrafos aplican ese principio elemental de la fotografía: que la fuente de luz este detrás de la cámara.
El día sigue de sol intenso, lo lamento por centenares de jóvenes y adultos que cargan sobre sus hombros instalaciones pesadas, pero me alegro por miles de personas que se deleitan con tanta belleza, creatividad y colorido.
La más bella y monumental.
Para cerrar la procesión desfiló la carroza más hermosa del Carnaval: la de un monstruo que no solo mueve la cabeza y las orejas, sino que parpadea y echa humo por las fosas nasales.
Se trata de una instalación monumental e increíble: todos los que la ven pasar no pueden menos que abrir la boca y las pupilas y extasiarse con semejante despliegue de belleza y creatividad.
Así que si este año no pudo estar presente en el Carnaval de Negros y Blancos de Pasto, desde ya prográmese para hacer parte de la fiesta el año siguiente. No se arrepentirá.
Fecha del desfile: Viernes 6 de enero de 2023.