Carnaval de Barranquilla 2018
Sábado 10 de febrero de 2018
Ciudad Pujante.
Barranquilla es la ciudad colombiana que mayor desarrollo ha tenido en la última década.
Muchas empresas del interior se vinieron para la arenosa y montaron fábricas tan cerca al puerto que, algunas incluso entregan la mercancía a través de bandas transportadoras que descargan los productos directamente en el buque.
Por otra parte, Barranquilla ha tenido buenas administraciones en los últimos tiempos. Alejandro Chad ha sido catalogado como el mejor alcalde de Colombia y para el 2019 el equipo Junior tiene una de las mejores nóminas de la Liga. ¡No hay cómo competir con ‘la arenosa’!
El monumento ‘Ventana al Futuro’ y el nuevo Malecón sobre el río Magdalena, son dos edificaciones inauguradas en el 2018 que evidencian el gran empuje de la ciudad.
La Reina abre el desfile.
Antes que se cerraran las vías me ubiqué en un Café Internet cerca a la vía 40 para aprovechar el tiempo y librarme del sol fuerte de la mañana, mientras llega la hora de la Batalla de Flores que comenzará a la una de la tarde.
Se ve mucha gente sobre la vía 40, nada de bajarle al entusiasmo por el atentado de hace días a la estación de Policía San José.
Lo primero que me impresionó fue la nutrida comparsa que acompañará a la Reina del Carnaval: Valeria Abuchaibe Rosales.
Conformada por jóvenes de las familias más pudientes de Barranquilla. Todos lucen sombrero blanco con cinta roja, los hombres con pantalón rojo y camisa blanca y las chicas luciendo un vestido muy colorido que simula tiras de sombrero vueltiado.
Este año como que hubo más carrozas. Pero algunas tan sencillas, que deberían descartarse después de una cuidadosa selección.
Otras en cambio con diseños monumentales y de gran calidad artística, exhiben modelos y reinas de cuerpos esculturales, gracias a una rigurosa alimentación y muchas horas en el gimnasio.
En realidad el Carnaval de Barranquilla no pierde fuerza y esta Batalla de Flores estuvo espectacular.
La mayor parte del tiempo estuve ubicado a la sombra de un gran poste en el cual también podía apoyar dos de las cuatro letras. Y aunque siempre brilló un sol inclemente la fuerte brisa de la costa Caribe permitió mitigar el sofoco.
Personajes famosos.
Este año también desfiló el ‘Papa Francisco’, con la novedad que iba custodiado por jóvenes vestidos con el uniforme de la Guardia Suiza. Excelente recurso, gustó cantidades.
También estuvo muy buena la representación de la India Catalina, el Virrey Sebastián de Eslava y el General Blas de Lezo con su pata de palo. En realidad al hombre que iba caracterizado de esa manera, le faltaba una pierna.
El Rey Momo anduvo vestido con un atuendo de plumajes rojos y sobre una carroza bien decorada.
El Rey del Carnaval de los Niños y la Reina Popular también desfilaron sobre carruajes de lujo.
Me hice fotografiar junto a personas disfrazadas con vestidos anchos, redondos y móviles, de los que caracterizan el Carnaval de Venecia.
Creatividad y colorido.
Una comparsa que me encantó fue la de aves de cuello alto con un mecanismo que hacía sonar sus picos de tabla, cada que los cerraban. Ese truco sonoro le dio vistosidad y suscitó miradas de asombro.
Grupos de personas recitando las famosas y picantes letanías se acercaban al público para dedicar sus sonetos graciosos y hacer reír a los espectadores.
Otras caracterizaciones no menos simpáticas desfilaron como los payasos, el hombre sin cabeza y los negritos que sacan su lengua roja para saludar a los turistas. Todo el mundo les corre, no sea que con su pintura negra manchen de tizne la ropa.
Tomé buenas fotos, buscando acercamientos para lograr rostros expresivos y figuras coloridas.
Lo que sí debe preocupar a los organizadores es que los grupos de danzantes son casi todos conformados por personas mayores de cuarenta y cinco o incluso más años.
No son muchas las cumbiambas de jóvenes y eso atenta contra la continuidad del Carnaval de Barraquilla, uno de los más suntuosos de América.
