Buenos Aires (Cauca).
Viniendo de Suárez, se atraviesa el viejo puente sobre el río Cauca. Del río hacia allá es Timba Cauca y del puente para acá Timba Valle del Cauca. Son en su orden, corregimientos de Buenos Aires y Jamundí.
El viaje desde La Balsa hasta Buenos Aires fue genial: en el camión Dodge ‘care-bola’ conducido por ‘Caliche’, un hombre alegre y amable.
Cuando le respondí que era paisa, el hombre exclamó de una:
‘Antioquia es el mejor departamento que tiene Colombia’.
Bueno, si lo dice él…
Capacitación itinerante.
Ya en Buenos Aires tuve una grata sorpresa: en la Casa de la Cultura había 19 mujeres recibiendo capacitación por parte de una psicóloga, enviada por la Oficina de la Mujer de la Gobernación del Cauca. El programa se llama Escuela Itinerante. Qué bien.
La profesional le preguntó a las señoras:
‘Ustedes creen que los medios de comunicación influyen en la imagen de mujer que tenemos?
No, qué pregunta. Me quedé allí escuchando las respuestas y hasta reforcé el mensaje que les dio la psicóloga.
Excelente que capaciten con estos enseñanzas a las personas de los pueblos. Cómo hace de falta un cambio de actitud en zonas tan machistas como el Cauca.
Precisamente ahora en la buseta que venía sonó la canción de Alzate que está de moda y que por estas tierras se escucha en todas partes: ‘Ni que estuvieras tan buena’. Su letra es de corte machista y claro, gusta mucho a los hombres para acompañar las cervezas dominicales.
La profesora les insistió en que no hay que ser flaca o de piernas largas, que el valor de cada una no depende de la figura que los medios quieren imponer. Y claro, les daba nociones para fortalecer su auto-estima y tener criterio propio.
Hidroeléctrica.
En 1.985 se puso al servicio la hidroeléctrica de La Salvajina, cuyo embalse con aguas del río Cauca, hace parte del municipio de Suárez.
Con ese reservorio de 30 kilómetros cuadrados se generan 270 megavatios de energía, al tiempo que se controlan las inundaciones del río Cauca.
Ha habido alguna inconformidad de parte de las organizaciones ambientalistas y los moradores del sector, porque según ellos, no se indemnizó adecuadamente a las familias desplazadas de la zona.
Así es el pueblo.
Buenos Aires es un pueblo agradable aunque pequeño. La iglesia y el parque principal ofrecen vista variada y atractiva.
En la parte inferior del marco de la plaza se encuentra la Alcaldía y el parque que tiene sombra suficiente, gracias a las ceibas que plantaron hace décadas.
Para el calor nada mejor que las tajadas de sandía, arenosa, fresca y jugosa que vende un señor en su carreta. De color marcado y pocas semillas, cuando atraviesan la garganta saben a trópico, Pacífico, pasión.
En la calle principal del pueblo se construyó la Biblioteca, me imagino donada por el gobierno japonés, a juzgar por la tejas de color azul que tienen todas las librerías niponas.
Lástima que no se invierta también en fomentar la lectura o que esa tarea no dé frutos todavía.
De pronto se vino tremendo aguacero del cual me guarecí en la panadería más grande de Buenos Aires. Poco a poco llegaron a librarse del agua los estudiantes que salían del colegio.
Casi todas las niñas de piel negra, que son la mayoría, llevan ‘extensiones’, esas trenzas postizas que se colocan para no parecer negras o verse mejor.
Regreso en chiva.
Justo cuando terminaba de comer la presa de pollo sudado, se escucharon los trompetazos de la chiva que venía con estudiantes en sus bancas.
Corrí a abordarla y sí, fue un viaje encantador desde Buenos Aires hasta Santander de Quilichao, recibiendo la brisa que entra por todos los espacios libres de la escalera.
El ayudante recorre las bancas pisando el estribo y agarrándose de los parales con los brazos. Mediante un silbido penetrante le indica al conductor en qué momento debe parar para recoger un pasajero o una encomienda.
Alcaldes de han sido: 2016-2019 Urdely Caravalí Carbonero; 2020-2023 Oscar Eduin López Sánchez.
Acá habitan en total 27.000 bonaerenses, 2.000 en el pueblo y 25.000 en las veredas.
Fecha de la visita: Lunes 10 de julio de 2017.