Bello (Antioquia).
Sábado 11 de octubre de 2014
Bello es un municipio con una población superior a la de varias capitales de departamento. Tiene en el casco urbano 360 mil habitantes, en tanto que en las veredas habitan unos 12.000 bellanitas. Su nombre recuerda al escritor y filólogo venezolano: Andrés Bello.
Una vez en la cuna de Marco Fidel Suárez, lo primero fue fotografiar el frontis de la iglesia desde ‘el edificio de las Dentisterías’. Y es que diagonal al templo parroquial, hay un inmueble de cuatro pisos, donde funcionan consultorios o laboratorios dentales. En los años 50 esta ciudad era famosa por la cantidad de ‘saca-muelas’ que ejercían allí. A Bello iba todo el que tenía una caries o algo para que le sacaran la pieza, pues en esa época no había otra solución.
La iglesia de Nuestra Señora del Rosario, es tan bella por fuera como por dentro. Afortunadamente hoy hace buen sol y el cielo azul con pocas nubes fue el fondo perfecto para las dos torres de la iglesia, con la Virgen del Rosario vaciada en aluminio, en medio de las dos torres y un rosetón precioso, en el centro de la fachada. Esta edificación se empezó a construir desde el siglo XIX, pero solo fue inaugurada el 10 de octubre de 1.947. Los ingenieros encargados de la obra fueron Jesús Mejía, Horacio Rodríguez y el italiano Albano Germaneti.
El interior del templo es muy lindo, precioso, diría yo. Predomina el color blanco de las columnas cuadradas y los arcos de medio punto. La cúpula se observa muy especial desde abajo y en las cuatro pechinas están las imágenes de los evangelistas. Recientemente decoraron el templo con retratos redondos de algunos santos, incluyendo los más modernos como Sor Teresa de Calcuta, Juan Pablo II y la Madre Laura. Tanto el altar como el piso fueron labrados en mármol de Carrara.
Otro decorado de gran belleza son los vitrales que engalanan las paredes. De finos diseños, exhiben escenas religiosas. Los capiteles dorados le dan elegancia y estilo a este templo románico. Las pinturas al óleo de la Sagrada Familia, la Última Cena y la ascensión de Cristo, entre otros pasajes bíblicos son admirables.
Y ni hablar de la puerta en bronce, con bajo relieve de la patrona parroquial. En fin que, me descrestó esta iglesia, he visitado muchas en mis viajes, pero de verdad que la de Bello sí es imperdible.
La Capilla de Hato Viejo, frente a la de Nuestra Señora del Rosario, es una joya arquitectónica de estilo colonial, que se conserva muy bien, aunque esta vez no pude fotografiarla por dentro.
También fotografié los músicos que tocaban melodías de despecho en el parque central. Y sí que se les escucha bien, el más joven en la primera voz y el otro la segunda mientras que el tercero toca muy bien el acordeón.
Por otra parte, se puede conocer en Bello, el Polideportivo, el Parque Acuático Tulio Ospina y la choza donde nació Marco Fidel Suárez, un bellanita de origen humilde, que gobernó a Colombia entre 1.918 y 1.921. La edificación que protege la vivienda con techo de paja. Tomé fotos al monumento ‘Elegía a una Lavandera’, un homenaje del escultor Jorge Alberto Marín, a Rosalía Suárez, la madre de Marco Fidel. Es una obra exquisita, con dos manos que se acercan en medio de un marco artístico y original. Se puede contemplar en una de las esquinas de la plaza principal, frente al edificio de la Alcaldía.
Por ahí cerca está lo que llaman el ‘Pasaje Guayaquilito’, donde hay palmeras y puestos de venta de todo tipo, como el mango picado tan delicioso que saboreé por $1.500.
El Café la Bastilla ocupa la edificación de la carrera 49 con calle 50, en la otra esquina diagonal a la Alcaldía. Ya no existe la sede con techo de teja de barro que hubo antes y fue no solo punto estratégico sino la esquina más emblemática del municipio. Una foto de cómo era ese café, se conserva en varios establecimientos de la plaza.
A la salida del centro hacia la Estación Niquía del Metro, se pasa por el parque de la Madre, en la calle 46 con carrera 45, en donde se aprecia la bella escultura abstracta. Más adelante están las instalaciones amplias del Hospital Marco Fidel Suárez.
Otros sitios de interés para conocer en Bello son: la Casa de la Cultura Cerro del Ángel y el Cerro Quitasol, desde donde se obtiene una bella panorámica de todo el casco urbano bellanita. Desde allí se puede observar el crecimiento urbanístico que ha tenido esta ciudad en los últimos años, casi que desde hace 20, cuando empezó a funcionar el Metro de Medellín.
